Todos lo hemos experimentado: Ese temido dolor de músculos después de un entrenamiento. Mientras que el sentirnos con dolor después de hacer ejercicio nos puede dar la sensación de que hemos ‘entrenado duro’, todos podemos levantar la mano cuando al tener que sentarnos y levantarnos después de entrenarlo podemos encontrar no solo frustrante sino ¡doloroso!

 Aquí algunos de los mejores consejos para aliviar ese dolor de músculos:

 Toma un baño de Sales de Epsom

Preparar un baño con Sales de Epsom ayudará a aliviar ese dolor de músculos que estás sufriendo. De hecho, el agua caliente favorece la relajación muscular y a mejorar la circulación sanguínea, mientras que las sales de baño (las cuales contienen sulfato de magnesio) ayuda a los músculos a relajarse y a poner en marcha tu recuperación.

Puedes encontrar Sales de Epsom en tiendas especializadas o “health stores”. Si estás experimentando dolor muscular, vierte 2 tazas en el baño para aliviarlo.

Usa un rodillo de espuma
Cuando usas un rodillo de espuma, éste ayuda a incrementar el flujo sanguíneo, lo cual puede ayudarte a aliviar esos músculos tensos y dolorosos. Por eso recomendamos usarlo justo después de hacer ejercicio y centrarse en las zonas que has trabajado.

Haz ejercicios de estiramiento

Todos lo hemos padecido. Después de haber hecho una sesión de entrenamiento en el gimnasio, nos podemos sentir con dolor muscular y lo último que queremos hacer es ¡estirar esos músculos!

Pero se recomienda firmemente. La clave para hacerlo correctamente es tomarse una el tiempo en estirar. Cuando sientes dolor muscular, generalmente significa que éstos están tensos. Lo que tienes que hacer es tomártelo con calma y estirar suavemente y ligeramente ese área. Poco a poco te ayudará a difundir el dolor. Pero asegúrate primero de hacer calentamiento antes de estirar.

Tómatelo con calma
Si padeces de dolor muscular y estás planeando hacer ejercicio en los próximos días, tómatelo con calma. Ir a dar un paseo te puede ir genial y es una forma excelente de aliviar el dolor de músculos, que sigan movibles y de favorecer la circulación sanguínea. Asegúrate de dar a esos músculos suficiente tiempo para recuperarse antes de dar el 100% en tu próximo entrenamiento.

Importante: Si todavía te sientes con tanto dolor que no te puedes mover o practicar ningún ejercicio, no sientas el deseo de empezar tu próxima rutina de ejercicios. Descansa, bebe suficiente agua y aplícate los consejos indicados arriba para ayudarte a relajar esos músculos y a recuperarte.

Fuente: KaylaItsines